“EN BUSCA DEL EDÉN” (Letra de PADA)
“En un pueblo del Sur vivió hace tiempo un niño
que no tenía
más que a un perro por amigo,
con el que
compartía el trabajo y los días,
guardándole
el ganado al más rico del pueblo,
por un
cuarto de pan y un mísero sueldo.
Teniendo doce años parecía tener veinte;
esquiva la
mirada, no confiaba en nadie.
Cuando
llegaba a casa lo esperaba su madre;
lo
estrechaba en sus brazos, le cambiaba el semblante.
La cena era
frugal, pues para poco había,
mas, tumbado
en su lecho, el sueño lo vencía.
Tras quedarse dormido con frecuencia soñaba
que su
infancia era alegre, que su padre aún vivía;
que de lunes
a viernes a la escuela acudía,
que él no
iba de pastor para quien no quería;
que la
guerra había sido solo una pesadilla,
que era su
cumpleaños y eran diez que cumplía...
En busca del Edén resoñaba el pasado,
jugando con
su perro y con otros muchachos,
corriendo
por los campos sin sentirse cansado;
oyendo,
entre dos luces, a su madre llamarlo...
Pero siempre al llegar a este punto del sueño
despertaba
de pronto, recordando aquel rato...,
cuando un
atardecer, de regreso a su casa,
se encontró
con su padre boca abajo tumbado...
Un nudo en
la garganta le impidió dar un grito
cuando vio a
varios hombres de su casa escapando.
Cuando
reaccionó, abrió un poco la puerta
y allí
estaba su madre, en un rincón, llorando...
En un pueblo del Sur vivió hace tiempo un
niño
que no tenía
más que a un perro por amigo,
con el que
compartía el trabajo y los días,
guardándole
el ganado al más rico del pueblo,
por un
cuarto de pan y un mísero sueldo.
Teniendo trece años parecía tener veinte;
esquiva la
mirada, no confiaba en nadie.
Un día, al
regresar..., se encontró con su madre
rehundida en
su lecho, demudado el semblante.
Llamándola: ¡mamá!,
le dio un beso en la frente,
la estrecho
entre sus brazos, pero ya estaba inerte.
En busca del Edén, decidió una mañana,
con tan
negro presente, no viajar al futuro.
En busca del
Edén... se marchó de este mundo...”.